sábado, 28 de septiembre de 2019





    
    ¿Qué podemos hacer cuando la vista nos falla tanto y este episodio de uveítis parece no querer aflojar? Algo que no nos exija demasiada precisión.  Como jugar con rollos de cartón.  Así, calmo la ansiedad y la depresión con mis Nutcrackers Menta (realmente el del caballito ha sido pura diversión):

















































































lunes, 23 de septiembre de 2019








     Extracto de la muy interesante investigación de Roberta D´Amore  Mercado del arte, posicionamiento del artista en el marco socioeconómico actual y autopromoción del artista (https://robertadamore.com/algunos párrafos con los que no puedo estar más de acuerdo.  Coincidir desde la realidad cotidiana con quien investiga desde el plano teórico nos confirma que no vamos por tan mal camino.










     “El prestigio de un artista le es adjudicado a través de los profesionales expertos en el arte. Éstos son: los comerciantes, críticos, investigadores y coleccionistas; -personajes de influencia que ya forman parte de un público cultivado-, y fijan una opinión que genera una buena repercusión sobre el artista y su obra. Esta opinión es la que ayuda al artista a ser distribuido dentro del mercado del arte. Así es que, como dijo el sociólogo Howard S. Becker:
“Lo que no es distribuido no es conocido y por ello no puede ser bien conceptuado o tener una importancia histórica. El proceso es circular: lo que no tenga prestigio no será distribuido. Esto significa que nuestra última consideración de lo que constituye gran arte tendrá que tener en cuenta la manera de distribución –con sus intrínsecas bases profesionales-”

     Entonces, se distribuye aquello que tiene un aparente valor a los ojos de los profesionales del mundo del arte. Pero no es posible apreciar el valor de esa obra sin antes haber sido distribuida. ¿Cómo entrar en ese círculo? He ahí la cuestión.

     Existen varios circuitos de distribución de arte… Salones de Arte, Galerías de arte, Casas de subastas, Ferias de Arte, Redes sociales y a través de los Influencers.  (…) Actualmente, la distribución del material artístico se ha convertido en una tarea algo más sencilla gracias a la aparición de Internet y el uso masivo de las redes sociales, en esta plataforma electrónica; lo cual, ha permitido que se expanda la visibilidad de cualquier aparición de material artístico, aplicándose una estrategia de Relaciones Públicas y Marketing Online adecuada para calcular un índice de visibilidad más o menos exitoso en un radio de territorio más extenso que lo que permitiría la distribución de material artístico a la vieja usanza… (…)

     Sin embargo, no por hablar de los beneficios y ventajas de los nuevos medios electrónicos de masas, aplicados a la promoción del arte y artista, ello debiera excluir a las formas tradicionales y más asentadas de visibilización de arte como lo son las exposiciones de arte en una galería, feria, salón o aparición en medios de comunicación tradicionales. Ambos sistemas actúan de manera totalmente complementaria. (…)

     La elección por la dedicación al arte, proceso de creación y técnica, y las temáticas de producción artística escogidas por los artistas están muy ligadas a los valores inculcados por sus familias, a la formación específica recibida dentro de la institución de aprendizaje, y otra serie de elementos fortuitos y casuales que van surgiendo dentro del camino recorrido por cada artista.  Según lo mencionado anteriormente, aunque el artista dentro de un sistema económico capitalista en el que ya no hay cabida a la figura de los patronos y mecenas que piden encargos al artista durante toda su vida como ocurría en épocas anteriores, el artista sigue sin poseer libertad 100% para la creación. Las ideas están fuertemente influidas por el sistema social dentro del cual se circula, habita, y uno se educa.

     El artista también debe tener en cuenta que la distribución, recepción y acogida de su obra viene fuertemente determinada por los gustos de la sociedad, el nivel económico que posee la misma y la época en la que se encuentra.

     La manera de que un artista adquiera prestigio en una sociedad o, más bien, ésta a través de su obra; se consigue empezando por una labor de distribución donde su obra pueda dar lugar a ser visibilizada. A ello contribuye como hemos visto, que los Influencers o, -también llamado público especializado-, fijen una opinión sobre la obra de determinado artista y dicho juicio sea visible y conocido por un amplio público siendo publicado en los medios de comunicación tradicionales y/o electrónicos.

     Entonces, aquello que no es conocido, no se distribuye. Sin embargo, si no es distribuido, no podrá llegar a ser nunca conocido. Es importante que los artistas noveles tengan esta premisa muy presente. Hoy en día, no es necesario tener un representante que te escoja para promocionar tu obra; existen muchos otros canales de posibilidades a explorar, sobre todo a través de la web y las redes sociales…

     Hemos visto que los lugares tradicionales de promoción, distribución y visibilización del arte son los salones de arte, casas de subastas, ferias de arte e Influencers. Estos tienen mucho éxito y gozan de un buen número de visitas cuando llega el momento de lanzarse el evento. Sin embargo, aunque no se diga públicamente, estos círculos suelen ser bastante selectos y no suelen entrar artistas noveles. (…) 

     Por otro lado, desde el nacimiento de la web 2.0 y la popularización de los blogs y redes sociales, ha sido posible la creación de comunidades virtuales donde las personas desde distintas partes del planeta intercambian información en relación a temas de su interés. En los últimos años, han empezado a utilizarse todas estas plataformas con el fin de dar una mayor difusión a la información. En el mundo del arte, ha ocurrido lo mismo y numerosas galerías de arte se han virtualizado y ahora gozan de presencia en la red, casas de subastas, ferias de arte, consultores de arte, etc. Y desde la popularización de la filosofía del DIY (Do It Yourself), muchos artistas están aprovechando para crear su propio site de visibilización a través de numerosas redes sociales muy populares entre la sociedad, conectarlas al blog donde van posteando todos los detalles de aquellos proyectos en los que van trabajando y, a su vez, a su espacio web donde se presentan a sí mismos como empresa de sí mismos. Todo esto no quiere decir que las formas tradicionales de distribución de arte dejen de ser útiles. Hasta el momento se ha visto que ambas opciones son perfectamente compatibles y complementarias. Pero el futuro está por verse.

     La gente que compra arte, normalmente, lo hace por la motivación del goce estético. Pero hablar de comprar arte es algo muy amplio. La compra de un objeto de arte no funciona como quien decide que necesita comprarse un par de calcetines para el invierno de Soria. Se trata de un tipo de adquisición parecida a la elección de la persona de la que te vas a enamorar; es decir, no existe ningún tipo de pragmatismo en esa elección.

          Centrándonos en el mercado del arte contemporáneo, la realidad es que el mayor volumen de capitales se reparten entre el top 10 de artistas contemporáneos por los que más se puja en subastas (Basquiat, Wool, Koons, Doig, Kippengerger, Zeng, Prince, Zhu, Haring y Hirst, en su mayoría de procedencia anglosajona). Los países que más dinero invierten en arte son Estados Unidos, China y Reino Unido. Éstos son países que gozan de un importante PIB por lo que se hace favorable el que se invierta en obras de arte que, son productos generalmente caros. (…) 

     Si un artista es bueno y original, les va a interesar, dejando las modas a un lado. Y los coleccionistas no sólo compran por impulso sino también cuando tienen referencias sobre un artista. Por lo que es muy importante ganar cuanta más visibilidad posible y en todo tipo de canales: exposiciones en lugares de influencia, notas de prensa, redes sociales, que algún especialistas se interese por tu obras, etc. (…)

     Muchas veces no se convence a otro a través de tu producto, sino que a ello hay que contribuir a través de tu persona. Demostrando seriedad, confiabilidad hacia la otra persona, compromiso y calidad en el trabajo; es muy probable que uno tenga suerte en poder hacer negocios con la otra persona. Y sobre todo, ir al lugar adecuado. Las galerías de arte quieren productos que, más o menos, entren dentro de la temática por la que ellos se guían, conocen y a la que está enfocada. E ir a una que esté dispuesta a arriesgar por los nuevos talentos.

     Especular sobre el tiempo de venta de un objeto de arte es algo muy poco determinado. Pero en vez de centrarnos en eso, es mejor centrarse en lo qué sí puede controlar un artista. Bajo mi punto de vista, no hay que centrarse tanto en hacer obra por hacer obra, sino en hacer Las Obras y en procurar que lleguen a cuanta más gente posible. Cuando hablo de Obra, me refiero a crear un proyecto que tenga una temática sólida, tenga una investigación detrás, se hayan empleado materiales de calidad para su ejecución y se vea que se ha hecho un trabajo bien cuidado; eso es atractivo a los ojos de cualquiera. Decíamos que en vez de hacer por hacer, lo ideal sería hacer menos pero de mayor calidad, con el fin de minimizar gastos y esos gastos tratar de revertirlos en crear beneficio o, simplemente recuperar el dinero invertido en dicho proyecto (que seguramente no sea poco). La clave puede ser: centrarse en hacer una buena labor de relaciones públicas. Es decir, existen numerosas posibilidades que implican costes mínimos o cero, que tienen un gran impacto social y de visitas y, lo más importante: son accesibles a todo el mundo. Estamos hablando del poder que tiene Internet entre miles y millones de personas en el mundo. ¿Cuáles son los sites virtuales que reciben una mayor cantidad de visitas al día? En primer lugar, las redes sociales. Facebook, Twitter e Instagram son fuente de numerosas visitas de personas al día en todo el mundo que tiene acceso de conexión a Internet. La clave es crearse una presencia en todas ellas y postear contenido en ellas con cierta frecuencia. En un primer momento, familiares y amigos serán los primeros en hacer seguimiento del contenido publicado en estos lugares.

     Bien, la clave de las relaciones públicas está en que si lo que contamos es de interés para nuestro primer público, la información irá circulando en boca de nuestros seguidores a otras personas que puedan verse también motivadas a seguir nuestros movimientos. Todo ello bajo un coste cero de dinero. Aunque, por otro lado, es una tarea que requiere tiempo pero es un tiempo que puede ser vital y traer consigo otras oportunidades de visibilización, -hay que quedarse con la palabra: oportunidades. (…)”



















viernes, 20 de septiembre de 2019








     “(...) Te escribo como siempre para quejarme y decirte que la vida es estúpida, el mundo injusto, el destino ciego, la sociedad idiota, y nada más... tengo casi todo lo que se puede tener; una cosa me molesta: la inteligencia.” Victoria Ocampo, carta a Delfina Budge, Autobiografía II, pág.122.





















    En estos días podría parafrasear perfectamente a la gran Ocampo.  Al cabo de un día, de uno solo, se escuchan y se leen tantas imbecilidades de personas que se autoproclaman “referentes” y que arruinan el futuro de tanta gente dejándonos como anonadados espectadores de  un grupo perverso y nefasto que sólo quiere destruirlo todo para vencer sobre las ruinas.











     “…el destino ciego, la sociedad idiota…”   Evidentemente poco ha cambiado mi país en tantos años, los males siguen siendo los mismos males.  Qué cansancio…  ¿Qué hacer frente a la sinrazón?  ¿Desprendernos de la inteligencia, dejar de razonar para que el relato aberrante que intentan imponernos no nos lastime tanto?  No.  Se respira, se resiste y se sigue.  Se insiste.  Nadie dijo que iba a ser fácil, ni justo, ni siquiera grato.  Se sigue, porque la única responsabilidad que tenemos es con nuestras propias convicciones.  No importa como salga, se sigue. “Allons! La marche, le fardeau, le désert, l'ennui et la colére…”  Arthur Rimbaud, Une Saison en enfer.

















domingo, 15 de septiembre de 2019


Ejercicios de práctica para calmar los nervios (o perder el rato con aquello que más nos gusta)