viernes, 28 de febrero de 2020




     Dos nuevas postales iniciaron su juego:  la mitad de The Circus emprendió camino hacia New York







…y su otra mitad aguarda en Finis Terra noticias de vida de su destinatario para realizar el mismo recorrido…




























     Metropolitain emprendió su travesía en forma completa: una mitad hacia Paris y la otra hacia New York.  ¡Buen viaje a las dos!















martes, 25 de febrero de 2020










     El turno de transformar a The Circus en Postales de Finis Terra. Otra vez sólo dividiremos por dos, ya que del destinatario seleccionado obtuvimos un único domicilio postal.  Una mitad viaja, una mitad se queda a la espera de su eventual requerimiento.

























































     Con las postalitas de The Circus he concluido siete diseños de los once proyectados inicialmente.    Y surge un problema: para las cuatro faltantes ninguna de las obras de Burlesque todavía no usadas resulta adecuada para la reducción y fragmentación.  ¿Entonces?  Dos caminos: o cerramos el proyecto de Finis Terra en siete destinatarios o mantenemos el plan original y completo las postales con diseños originales en la misma estética.  Me he propuesto tomarme el día de hoy para decidir al respecto.  ¿Cómo decido?  Fácil: martes de carnaval, feriado, día para dibujar y dibujar.  Veremos que sale (las ideas no las pienso, las trazo sobre papel).
















sábado, 22 de febrero de 2020




     Mientras las Postales de Finis Terra siguen su curso (algunas en viaje, alguna quizá en destino, otras en pleno proceso creativo), me escapo un rato para ocuparme de otro proyecto.  Ante la concreta posibilidad de participar con un par de obras en una feria de arte en Barcelona el próximo mayo, empiezo a componer algo con la intensión que sea especial y acorde a ese evento.

     Se sabe que en las ferias hay mucho público pero también mucha oferta.  La chance de ser notado es escasa y realmente fugaz.  Las obras deben estar atentas para provocar la curiosidad del espectador que deambula, capturarlo y obligarlo a acercarse.  La meta es lograr la atención plena por lo menos un minuto.  Obras capaces de salir de cacería con la determinación sangrienta de atrapar un espectador a como dé lugar.

     Así, sabiendo de antemano que juego han de jugar, empiezo de cero dos obritas que planeo trabajar en paralelo, porque ellas estarán solas en su destino y deberán acostumbrarse a conformar un equipo eficaz y compacto.  Que recorran juntas el camino desde el inicio mismo.

     Un par de retratos femeninos como punto de arranque.  Dibujamos con lápices acuarelables sencillamente porque nos divierte no saber que color habrá de predominar (a veces sólo depende de que lápiz tiene más punta…)




















     Limpiamos los rasgos con tinta en gel.  Con luz fría directa (como el flash) el efecto de la tinta es encantador:






































     Quemamos el papel, porque la danza con el fuego ya es parte de nuestra vida y mas vale que las chicas se lleven un poco de todo lo que abunda por acá.  Para la bitácora de la prudencia: usé papel de boceto, arde demasiado fácil, casi incendiamos el taller.  Conviene papel para acuarela que ralentiza el quemado y es más resistente a la abundante agua necesaria para controlar el desorden.  Hubo un instante que temí arruinarlas, pero sobrevivieron a las llamas.
































     Nuevamente, el papel de bocetos no es el ideal para el exceso de humedad que requiere el pegar la lámina blanca sobre el papel artesanal color.  Otra vez filamos el desastre.  Pero aguantaron.  Mis chicas cazadoras están demostrando fortaleza frente a la torpe imprudencia de quién las compone.  Seguimos.




























miércoles, 19 de febrero de 2020









     A primera hora de hoy Bistro de Paris y La Vie en Rose emprendieron sus fragmentarios y múltiples viajes.   Las Postales de Finis Terra siguen su curso, y ahora le toca el turno a Metropolitain:



























































domingo, 16 de febrero de 2020



     Aprontados los siguientes envíos.  Tres postalitas de Bistro de Paris irán a sendos domicilios de galerías de David Zwirner, una a New York, otra a Paris y la tercera a Londres.  La cuarta postal queda conmigo, a la espera de que la reclamen para volver a componer un todo.
















     La Vie en Rose, dividida en sólo dos postales, viaja a Berlín, a la galería de Esther Schipper.  Su mitad queda en Finis Terra al aguardo de noticias…






















sábado, 15 de febrero de 2020




     Ayer viernes despaché por fin las primeras ocho postales desde Finis Terra.  Después de pasar demasiado tiempo dándole vueltas a la idea, tomando conciencia de lo absurdo y nada redituable del proyecto mientras me entusiasmaba más y más con la posibilidad de organizar unilateralmente un juego de aspiraciones colectivas que vincule a totales desconocidos a océanos de distancia, ayer fue un cierre.  Ya está.  Ya empezamos.  Nada de lo que sigue está bajo nuestro poder.

     Al colocar la responsabilidad de la siguiente movida en un ámbito ajeno a nuestra voluntad, uno pasa a una relativa tranquilidad.  Hecho lo que dijimos que haríamos podemos volver a la lánguida actividad que más nos place.  Dibujar.  Un par de postalitas más.

     Le llegó el turno a Bistro de Paris (la que volvió de Venecia)…








… y a La Vie en Rose (la que aun no logré repatriar de Londres)…







          En esto estamos: