domingo, 27 de mayo de 2012



     Amanecí con ánimo nostálgico. Argumento que antes exponía mi trabajo una o dos veces al año sin mayores problemas. ¿Por qué ya no puedo?





     Siempre pinté chicas desnudas. Siempre hubo mucha piel. ¿Que cambió?









     Pero giro la cabeza y veo sobre mi desvencijado caballete LA SANTA INQUISICION en la que estoy trabajando, lento pero sostenido, y pienso que sí, que algo cambió, que mi trabajo maduró. El mundo probablemente no. Ya no estamos en la misma dimensión. Y puede (puede) que tengan razón cuando me niegan la posibilidad de mostrar mi obra. Tal vez no es el tiempo todavía...




viernes, 25 de mayo de 2012

PLAGIARIA fue primero el título simpático de una serie de trabajos que mezclaban obras clásicas con mi pasión por la cartografía medieval y renacentista. Era una especie de chiste entre mi capricho de plagiar un Velázquez con “pinturitas” (lápices de colores) y el arruinar esas pasables reproducciones con ríos, montañas y nombres imposibles de lugares improbables.
Con el paso del tiempo, PLAGIARIA se volvió una especie de “licencia”, un espacio lúdico donde podía simplemente disfrutar mis pasiones en conjunto sin el menor remordimiento: mis mapas, mis pintores preferidos, el goce del dibujo y el riesgo real del fracaso al mezclar materiales y soportes sin ninguna prudencia. Y jugar con fuego, claro, porque también me permito “intervenir” mi trabajo con un encendedor…
Para justificarme recurrí después a otro de mis vicios: la literatura. “Sabemos que el arte es continuación y parentesco. “Un pintor hace a otro pintor”, dijo Renoir con patética sencillez. No se perseguía en Las Flores del Mal algo insólito y desmesurado. (…) Baudelaire señaló así, con irónico desenfado (ese desenfado que heredó y derrochó Oscar Wilde), las influencias recibidas: “Notas sobre los plagiados: Tomas Gray, Edgar Allan Poe (dos pasajes), Stace, Virgilio (todo el trozo de Andrómaca), Esquilo, Víctor Hugo.”” (Ulyses Petit de Murat, Las Flores del Mal, un juicio que lapida a sus jueces). YO POR AQUELLOS AÑOS LO IMITÉ, HASTA LA TRANSCRIPCIÓN, HASTA EL APASIONADO Y DEVOTO PLAGIO (…) NO IMITAR ESE CANON HUBIERA SIDO UNA NEGLIGENCIA INCREIBLE.” JORGE LUIS BORGES, Sur 209-210 marzo abril 1952.

domingo, 20 de mayo de 2012



   FIN DE SIGLO (1996) 



     Esta obra, actualmente en Francia según mi último registro de ella, me ha dado varias gratificaciones. Expuesta en el Centro Cultural Recoleta en diciembre de 1996, me sorprendió un domingo leyendo en Clarín la reseña del evento (http://edant.clarin.com/diario/96/12/08/e-05304d.htm) y signándola como una de las obras destacadas del evento (sólo que la llaman “El desafío” por un error de la curaduría que el coloca el nombre de otra de mis obras que finalmente no fue expuesta). 

      Años más tarde vagando por internet la veo reproducida como “obra destacada de la semana” en el portal digital de El Universal de México. Posteriormente la propongo para el concurso de arte del Chateau des Reaux en el Valle del Loira. Fin de Siglo es aceptada, me indican los pasos para la remisión y días después me acreditan en mi cuenta el importe en euros por la adquisición de la obra.

      Ciertamente nunca recibí el catálogo del evento y nunca ví la reproducción de la exhibición en la web, pero hace un par de años me enviaron por correo postal la copia certificada del contrato que suscribí con el organizador y por el cual él adquiría legítimamente la obra. 

      Algun día iré a Francia a rastrear que fue de Fin de Siglo con sus largas piernas. Pero la vinculación con Ragnarök viene por su “resago”. Siendo imposible sacar del país a Fin de Siglo por el procedimiento “oficial” (obtuve varias veces la autorización de Cancillería pero para el envío me requerían un despachante de aduana, cuyos honorarios eran los mismos por despachar un cuadro que la cosecha de manzanas de toda una provincia), envié mi obra a Francia enrollada en una caja tubo del Correo Argentino

      Y en mi taller quedó circulando el bastidor de madera donde se tensara la tela. Sobre el bastidor acabé tensando papel misionero, sobre el que luego apliqué distintos tipos de papeles (encerado, artesanal, cartulinas escolares) en distintos proyectos que nunca llegaron a buen puerto. Pegué y arranqué hasta que empecé a esbozar LA SANTA INQUISICION

     Disgregación marginal: debe ser cierto sadismo inconsciente el que me lleva a trabajar con óleo diluido en abundante kerosene sobre un soporte de papel sostenido en madera. Altamente inflamable. Alegoría poética o destino preestablecido. 

       El eje central de LA SANTA INQUISICION (en la que estoy actualmente en plena etapa de desarrollo) es una mujer desnuda, de espalda sentada sobre sus talones. El fondo tiene escrito los nombres de personas quemadas en la hoguera por la Inquisición. Ahora bien, cuando quise obtener el nombre concreto de personas ejecutadas en el fuego por la iglesia de Roma me topé con el hecho de que no hay a simple alcance nómina alguna. Un rápido googleo pone como accesible estadísticas de cantidad de muertos y procedimientos tortuosos para esas muertes, pero no los nombres de las víctimas. Si bien es cierto que el procedimiento del Santo Oficio era minucioso y el detalle pormenorizado de las víctimas DEBE EXISTIR, es muy poco probable que una ignota artista plástica de Baires pueda acceder a los Archivos Vaticanos y hacerse de esa información. 

      Por eso en paralelo con el trabajo puramente plástico me dispuse a confeccionar una pequeña nómina de personas reales y concretas que fueran asesinados por la Inquisición, para de esa lista tomar los nombres que conformarán el fondo rojo y vibrante de mi Santa Inquisición. De mi biblioteca personal, de mis libros sobre catarismo, la cruzada albigense y el exoterismo occitano obtuve varios nombres. Textos de templarios y la saga de los Borgia me dieron otros. Google me está dando pistas para investigar sobre jesuitas y reformistas. Transcribo la lista que tengo armada hasta hoy. Sigo buscando. Lamentablemente hay más nombres para seguir añadiendo. 


“¿Seremos, nosotros mismos, clientes potenciales de una Inquisición siempre lista para renacer de las cenizas de una Iglesia que pretenda detentar la verdad única? En ciertos sentido, si. De hecho, la herejía nos seduce, nos sentimos herejes. Mostramos una especial indulgencia hacia las víctimas de las hogueras de la Inquisición. Pero son sólo lágrimas inútiles las vertidas sobre estos mártires. Nos interesan sólo en la medida en que representan nuestras tendencias inconscientes: el hundirse, como decía Baudelaire, en el fondo de lo desconocido para encontrar allí lo nuevo. Pero el poeta tomaba la precaución de luego precisar: ¡Infierno o Cielo, que más dá!.”

 Jean Markale, El Enigma de los Cátaros, Grupo ILSHA S.A. Buenos Aires 2006, pág. 192.


Nomina de herejes quemados en la hoguera (cátaros):   1. Guillaume Bélibaste, cuya muerte en la hoguera en el otoño de 1321 marcó la desaparición de la fe catara en el patio del castillo de Villerouge – Termenés, pueblo situado en el corazón desnudo de Corbiéres. 2. Pedro de Bruys igual que los cátaros, desdeñaba las riquezas de la Iglesia y las imágenes de la cruz. En una hoguera de estatuas cerca de la desembocadura del Ródano, el Viernes Santo de 1139 volvió la espalda demasiadas veces y algunas personas furiosas lo arrojaron a las llamas. 3. Arnoldo de Brescia proclamo la Republica de Roma en 1146 y expulsó de la ciudad al aterrorizado Papa. Pasaron ocho años antes de que Nicholas Breakspear, el único inglés que seria pontífice, pudiera volver a su residencia del Palacio de Letrán. Arnoldo fue detenido, estrangulado y quemado y sus cenizas arrojadas al Tiber para que ninguno de sus numerosos seguidores romanos pudieran crear un culto a su cadáver. 4. Vigouroux de la Bacone uno de los mas destacados perfectos de Tolosa. En 1233 fue juzgado, condenado y quemado en la hoguera. 5. Bertrand d'en Marti guía espiritual de los más de doscientos perfectos de Montségur. El 16 de marzo de 1244 los guías de la fe cátara, descalzos y vestidos sólo con hábitos bastos, subieron las escaleras apoyadas en los muros de madera. Los ataron juntos por grupos, de espaldas a los altos postes que sobresalían del colosal féretro. A una señal del arzobispo sus hombres arrojaron tizones encendidos al recinto. 6. Dama Corba de Perelha (o Perella) Montségur 16 de Marzo de 1244.- 7. Guilhermina Aicart Montségur 16 de Marzo de 1244 8. Guilhem de Lahille Montségur 16 de Marzo de 1244 9. Brezilhac de Cailhavel Montségur 16 de Marzo de 1244 10. Guilhem de Marsella Montségur 16 de Marzo de 1244 11. Bernart de Sant Martí Montségur 16 de Marzo de 1244 12. Guilhem Garnier Montségur 16 de Marzo de 1244 13. Arnaut Teuly de Limoux Montségur 16 de Marzo de 1244 14 y 15. Pons Narbona y su mujer Arsendis Montségur 16 de Marzo de 1244 16 y 17. Arnaut Domergue y su mujer Bruna Montségur 16 de Marzo de 1244 18. Esclaramunda de Perelha (Esclarmonde de Rerella) Montségur 16 de Marzo de 1244 19. Marquesa Hunaut de Lanta (Marquesia de Lantar) abuela y madre de Esclaramunda y Corba de Perelha, tres generaciones de los señores de Montségur son inmolados en el Prat dels Cremats (Prat del Cramats), el Prado de los quemados. 20. Raimonde Fabre En septiembre de 1305 fueron capturados dos perfectos y se inició una caza del hombre. Durante los siguientes cinco años los perfectos de Pierre Autier fueron condenados a la hoguera. 21. Pierre Raimond Perfecto de Pierre Autier, condenado a la hoguera (período 1305/1310). 22. Amiel de Perles Perfecto de Pierre Autier, condenado a la hoguera (período 1305/1310). 23. Prades Tavernier Perfecto de Pierre Autier, condenado a la hoguera (período 1305/1310). 24. Pons den Baille Perfecto de Pierre Autier, condenado a la hoguera (período 1305/1310). 25. Sibille den Baille Destacada creyente del grupo de Pierre Autier, hermana de Pons den Baille, condenada a la hoguera (período 1305/1310). 26. Pierre Sans Perfecto de Pierre Autier, condenado a la hoguera (período 1305/1310). 27. Guillaume Autier Hermano de Pierre Autier , condenado a la hoguera (período 1305/1310). 28. Jacques Autier Hijo de Guillaume y sobrino de Pierre Autier , condenado a la hoguera (período 1305/1310). 29. Pierre Autier En 1309 por fin atraparon al escurridizo Pierre Autier. El 9 de abril de 1310 los inquisidores lo arrastraron hasta la fachada de la Catedral de Saint-Etiemme, de Tolosa, y allí lo quemaron vivo.- 30. Philippe d´Alayrac Iniciador de Bélibaste. Logró con éste escapar de la prisión de Carcasona en 1309 y huyeron a los Pirineos, hasta llegar a Cataluña. El año siguiente se aventuró al norte en una misión de misericordia, fue capturado y arrojado a la hoguera.- (templarios) 31. Jacques de Molay Ultimo Gran Maestre del Templo, quemado en la hoguera por no aceptar los falsos cargos impuestos por la Inquisición, Ile-des-Javiaux (Paris) 18 de Marzo de 1314.- 32. Godofredo de Charnay Ile-des-Javiaux (Paris) 18 de Marzo de 1314.- (sacerdotes y monjes católicos romanos) 33. Girolamo Savonarola (Girolamo Maria Francesco Matteo Savonarola Ferrara, Italia, 21 de septiembre de 1452 - Florencia, 23 de mayo de 1498). Religioso dominico confesor de Lorenzo de Médici, sus ataques contra el Papa Alejandro VI (Rodrigo Borgia) le valieron la excomunión y la prisión, y más tarde, la condena a la hoguera. El día fijado para su ejecución fue llevado hasta la Plaza della Signoria junto con sus fieles seguidores, Fray Silvestro de Pescia y Fray Domenico. A los tres se les quitó la ropa, fueron tratados como herejes y entregados al brazo secular. Un testigo cuenta en su diario que el fraile tardó en quemarse varias horas. Los restos fueron sacados y devueltos a la hoguera repetidamente, a fin de que se redujeran a cenizas y sus partidarios no los trataran como reliquias. Cuando quedaron reducidos a cenizas, fueron arrojadas al río Arno, al lado del Ponte Vecchio. 34. Fray Silvestro de Pescia Seguidor de Savonarola lo ejecutan con este en la hoguera en Florencia el 23 de mayo de 1498.- 35. Fray Domenico Seguidor de Savonarola lo ejecutan con este en la hoguera en Florencia el 23 de mayo de 1498.- 36. Giordano Bruno Nápoles 1548- Roma 17 de febrero de 1600. Astrónomo, filósofo, religioso y poeta italiano. Por su pensamiento teológico fue condenado por la Inquisición romana por herejía y panteísmo y quemado en la hoguera. 37. Jan Hus Sacerdote que criticaba la corrupción moral de la Iglesia de Roma. Desde 1408 encabezó el movimiento conocido como “husismo” que predicaba la desobediencia a Roma porque los sacerdotes vivían en el pecado. Acudió al Concilio de Constanza a exponer sus ideas pero allí fue condenado por herejía. Murió en la hoguera el 6 de julio de 1415. Antes de ser quemado Hus dijo: “Vas a asar a un ganso, pero dentro de un siglo te encontrarás con un cisne que no podrás asar” Suele identificarse a Martín Lutero con esta profecía, quien 102 años después clavó sus 95 tesis en Wittenberg y en si escudo de armas figuraba un cisne. 38. Patrick Hamilton (1504-29 de febrero de 1528) Sacerdote escocés, juzgado como hereje por el arzobispo James Beaton y quemado en la hoguera en St. Andrews. 39. Thomas Cranmer (Julio 2 1489 – marzo 21 1556) Arzobispo de Canterbury, ayudó a construir un caso favorable para el divorcio de Enrique VIII de Catalina de Aragón que se tradujo en la separación de la Iglesia inglesa (anglicana) de la Santa Sede. Cuando Maria I (Estuardo) llegó al trono fue encarcelado y condenado como hereje y quemado en la hoguera. 40. Gabriel Malagrida (5 diciembre 1689 Menaggio, Italia 20 de septiembre de 1761 Lisboa Portugal) Jesuita italiano, misionero en Brasil y predicador en Lisboa. Fue condenado por falso profeta y hereje. Murió ahorcado y su cadáver quemado en un auto de fe la noche del 20 de septiembre de 1761.




miércoles, 16 de mayo de 2012




     Hay temas o cuestiones que nos marcan y sobre los que siempre, invariablemente, acabamos volviendo una y otra vez. El auténtico "eterno retorno". Pareciera que la vida nos gana: nos domestica, nos sociabiliza y nos adoctrina a aceptar el parecer de la mayoría y a no fastidiar a los demás con nuestras diferencias. Pero es una ilusión. Esos temas siempre están ahí, acechando, dispuestos a reaparecer y a tomar protagonismo.

      En mi caso uno de esos temas es la religión. En lo personal, soy una agnóstica sin trauma. No llego a la indiferencia de la fe por una "crisis" o por rebelión o por un éxtasis iluminado. Simplemente yo decanté. Ser agnóstica es la conclusión lógica y racional a mi desarrollo intelectual y espiritual. Tengo una total ausencia de necesidad de religión, entendida la religiosidad como pulsión natural para explicar lo desconocido, como mecanismo de defensa ante el temor atávico a la muerte. Yo carezco de esa pulsión y probablemente de ese miedo. Soy demasiado cerebral o he leído más de lo conveniente.

      Y si bien podría haber transcurrido tranquilamente sin ningún tipo de "educación en la fe", sin el "conocimiento de la palabra de dios", por mandato cultural fui introducida en la religión, y como dice Eco, la católica es la religión de mi niñez. Crecí entre estampitas de santos y virgencitas. No es nada personal, pero nuestra infancia es esa patria de la que nunca emigramos del todo. No me encarnizo ni hay mala voluntad, sólo que he estado más cerca de la iglesia de Roma que de otros credos, y tuve mas acceso a sus contradicciones, crímenes, anacronismos y mentiras.





     RUINAS RELIGIOSAS tiene más de diez años (creo que es del 99), y hace más de cinco o seis que alguien en México la compró y desde entonces ignoro por dónde esta esa obra. Pero fue uno de los primeros amagues de Ragnarök. Una chica sin ropa en Santa Sofía con viejas estampitas bendecidas de mi abuela. Un resumen de mi curiosidad por el sentido religioso.





     MI CRISTO MI MAGDALENA es una obra más vieja aun, de 1998. Se expuso varias veces sin mayor conflicto. Ya ahí empecé a delatar mi curiosidad por la Inquisición. Ya en esta obra reseño parte del Código del Inquisidor  (el Martillo de las Brujas) que cita una a una las herejías sancionadas.





     PRISIONERA DEL CATESISMO (2010) es el previo inmediato a mi decisión de trabajar exclusivamente en Ragnaök. Una obra absolutamente personal, hecha para mi disfrute del trabajo a lápiz, del empaste de luces y el juego con la caligrafía en tinta. Y el ronroneo de un fragmento de Rimbaud descubierto en mi adolescencia repiqueteando cálidamente en mi cabeza: 

  “¡Las nobles ambiciones! ¡Y esto es todavía la vida! -¡Si la condenación es eterna! Un hombre que quiere mutilarse está bien condenado, ¿no es verdad? Yo me creo en el infierno, entonces estoy. Es la ejecución del catecismo. Yo soy esclavo del catecismo. Yo soy esclavo de mi bautismo. Padre, habéis hecho mi desgracia y habéis hecho la vuestra. ¡Pobre inocente! – El infierno no puede atacar a los paganos.” 

Una temporada en el InfiernoNoche del Infierno - Arthur Rimbaud




lunes, 14 de mayo de 2012


     Dice Borges al final de Ragnarök: “Sacamos los pesados revólveres (de pronto hubo revólveres en el sueño) y alegremente dimos muerte a los dioses.” 

      No pude apartarme de esa imagen nunca. Cuando leí por primera vez Ragnarök (en mi adolescencia) el texto me maravilló aunque no conocía que significaba la palabra.   Años después supe que era una referencia nórdica al apocalipsis. El ocaso de los dioses. Después me reencontré con el término con referencia a montones de cosas distintas. Y lógicamente yo también le atribuí mi propia significancia: mi opinión definitiva sobre la religiosidad (la fe, la superstición o eso en lo que se cree cuando uno no cree en nada o cree en todo). 

      Ragnarök es mi pasar en limpio mis convicciones. Mi curiosidad morbosa por lo religioso (resultado de los cinco años de teología en la universidad, los mitos greco-romanos relatados en coloridas historietas que compraba de usado en la feria del barrio y la serie Xena- la princesa guerrera). Y mi obsesión de organizar y compendiar lo poco que conozco. Y analizarlo. Y pintarlo. Todo lo que sé pero en colores (y con chicas sin ropa).






     Ayer terminé mi Diablito panameño. Una máscara de festejo de la celebración del Corpus Christi en la comunidad de Todos los Santos.

      En enero de este año, en Panamá, tuve contacto con este tipo de máscaras y con el relato de la celebración (los “Diablitos Sucios” simbolizan el mal y el poder del diablo y en los festejos religiosos –católicos- de la Colonia se usaban para catequizar mediante la pantomima a los indios). Típico despliegue de sincretismo, estas máscaras son marcadamente tribales, animistas y hermosas. Y como contundente justicia poética mientras que los dogmas católicos se diluyen y se borronean estas máscaras resplandecen triunfantes y cautivan al observador. Hice mi propia versión, como homenaje admirado a la espiritualidad colorida de los paganos americanos o como resultado de que los Diablitos que observé en Panamá me chuparon el alma y Satanás me usa para predicar al sur del itsmo. Vaya uno a saber...




sábado, 12 de mayo de 2012



     Supongamos que tengan razón. Supongamos que piré irremediablemente y mi trabajo tornó a una decadencia procaz que no merece espacio en las probas y escrupulosas galerías de Baires -que pueden colgar porquerías mediocres pero no mis desnudos-. 

     Supongamos que mis desnudos no tiene valor artístico ni estético, que no están a la "altura", que no vale la pena ni siquiera considerarlos para su exhibición al público. Supongamos que "no se corresponden con la línea estética de la galería" o "no están dentro de los parámetros de la búsqueda actual del Curador". Supongamos que estoy de acuerdo. Supongamos que no molesto más. Supongamos que acepto que mis obras no saldrán de casa. Que desde ahora pinto sólo para mi. Soy una persona pacífica, educada para la sumisión a las normas, para la cortesía y los buenos modales. ¿No me quieren colgar? Está bien. Ya entendí. No me cuelguen. Estamos en paz. 

     Así que sobre la premisa de que lo que hago es sólo para mi definitivamente voy a hacer lo que me de la gana. O sea, voy a llevar a cabo esos proyectos que sé que nadie se va a atrever a colgar. Llegó el momento de dedicarme exclusivamente a Ragnarök.








lunes, 7 de mayo de 2012

     Amablemente me han "sugerido" que no me "limite" a los desnudos, porque estoy limitando seriamente los espacios donde poder exhibir. Amablemente he sugerido que se paren frente a un puesto de diarios y revistas y comprueban que los editores no limitan sus ventas por colocar señoritas desnudas en sus tapas. Y ciertamente yo soy más sutil (afirmación que me surge al estar parada frente al puesto diarios que hay en la terminal del 37 contemplando una revistita de nombre "INCESTO").- 

      Pero intento alternativas. Me pongo a pintar objetos utilitarios, con esa lógica mercantilista de que pintar cosas útiles puede ser una manera de acceder a un mercado menos exclusivo. O.K. Pinté una bandeja. Tampoco me la miraron bien.





       Hice una cajita (hace años que me dicen que pinte cajitas para vender en una feria de artesanos, que al menos así voy a vender algo). Una caja para habanos. Mi Caja Borgia.   Lucrecia y su papá el Papa Alejandro VI.

      También obtuve un "no" cuando quise mostrarla junto a algunas otras de mis obras.






     Solo se trata de desnudos. ¿Cual es el problema? Nada que no hayan visto antes. Ciertamente, mi serie de desnudos de Plagiaria son desnudos ya muy vistos.











Prisionera del catesismo



Las Américas



Resabio de Conquista

     Estas tres obras fueron -como no- rechazadas nuevamente. Ellas y varias más. Supongo que hay alguna razón para que los mismos lugares donde antes exponía hoy consideren que mi trabajo ya no está a su altura.

     Así que solo me queda intentar mostrar mi trabajo acá, porque las galerías de Buenos Aires no me consideran apta para el público.