martes, 11 de febrero de 2020



     Tal vez la característica que más diferencia a un artista de las personas “socialmente adaptadas” (los “normales” como coloquialmente decíamos cuando no guardábamos esta ridícula prudencia hacia la exacerbada susceptibilidad de los estúpidos) sea el extremo cuidado por los detalles.  Para un artistas el detalle (los múltiples y casi infinitos detalles de cualquier cosa que emprenda) es tan importante como el todo.


     Así, todos los detalles que involucra llevar a la práctica el proyecto de mis Postales de Finis Terra han sido estos último días cuestión prioritaria de ocupación full-time.


     Nos demoramos con los sobres para el envío, para que tuvieran impreso alguna referencia identificatoria del proyecto:









     Para proteger la mixtura de materiales y la fragilidad de lo chamuscado, recorté unos símil de carpetitas en papel encerado en dos tamaños (porque mis postalitas no sólo exceden la medida estándar tradicional sino que aquellas que fragmentan en dos la obra original son aun más grandes que las que fragmentan en cuatro):









     Para cerrar esas seudo-carpetitas de papel diseñamos e imprimimos unas etiquetas que refieren a las postales en los distintos idiomas que corresponden a los destinatarios previstos.














     Para las notas que acompañarán a cada postal quise algún papel más “bonito” que el común, pero la oferta por estos días y por estos lados no es muy variada.  Era amarillo o rosa y lo rosado tiende a ponerme nerviosa, así que la opción fue por obligado descarte…












     Reduje el texto final a unas 150 palabras, sin contar la Post Data porque bueno, todo no se puede y algún link explicativo extra era imprescindible dar al desprevenido destinatario.



     Impresas las notas, tres series de postales listas, preparo los primeros envios.  Tres postales de Le Cirque viajarán una a Paris, una a Londres y la tercera a New York, cada una a una locación de galerías de la top100 de la ArtReview Marian Goodman.















































































































































































































































































































































































































































































































    Janet hará lo mismo hacia las galerías de Marc Glimcher (Londres, New York y Palo Alto - California).














































































































































































































































































































































































































































     Las dos postalitas de Burlesque Circus irán a Londres, a dos emplazamientos de galerias de Sadie Coles.  Ellas deberían tener fácil el volver a reunirse unificando la obra de origen.



































































































































































































































































































































     Se trata de un juego.  Desde Finis Terra peregrinan al (presunto) centro del mundo a reunirse otra vez.  ¿Entenderán los destinatarios el objetivo y se sumarán al juego?  Imposible saberlo por adelantado.  Entonces, ¡juguemos!















































































































































































No hay comentarios:

Publicar un comentario