miércoles, 29 de septiembre de 2021

 


     Empezamos otra vez, la excusa ahora es darle utilidad a una (endeble) cartulina rosa y tener la oportunidad de trazar algún dibujo maniático para calmar los nervios.  Un retrato, fuego y el plagio reverente a un Albrecht Dürer, The Sea Monster, circa 1498.  Para pasar un buen rato.

































































































No hay comentarios:

Publicar un comentario