Te
explico: más allá de las varias razones y justificaciones que tuvo este blog al
iniciarse (lo del sello de agua en las
obras ya se perdió en el reino de la intrascendencia), sobre la marcha se convirtió en un currículum vitae dinámico, visualmente
atractivo, con mayor aporte de información y documentación de la que
normalmente se brinda en un resumen y con el extra concreto de imágenes no sólo
de las obras sino también de las muestras y exhibiciones que realmente se
concretan.
Así, cuando
uno tiene que presentarse ante alguien, en lugar de sacar la triste listita de “formación- muestras colectivas – muestras individuales
– premios recibidos” uno da la dirección web y a través del blog, saltando
de una entrada a otra, quién no nos conoce puede hacerse una idea cabal y
rápida de lo que hemos hecho hasta aquí.
Armarse un
blog es gratis y si uno se sienta dispuesto a aprender, el mecanismo de subir
imágenes y capturas de pantalla es sumamente fácil. Con un poco de práctica, apenas se requiere
quince o veinte minutos para subir una entrada que actualice nuestra actividad. Y siendo un espacio personal, el artista se
asegura que las imágenes y la información es absolutamente leal a su obra y a
su intención frente al espectador. No
hay malos entendidos de nadie: es uno mismo quién se presenta y muestra su
hacer como quiere.
Como
aconsejan los carísimos RRPP inaccesibles para un artista: “la
página institucional de la empresa es la carta de presentación más importante
que se tiene a la hora de posicionarse en el mercado y atraer clientes”. Un institucional eficaz es el que da toda la
información básica esencial en una pasada rápida y dónde una imagen pueda
reemplazar a las palabras, lo visual es de captación inmediata y más perdurable
en la memoria. Traspasando esta
dialéctica de publicista a un artista y su currículum vitae: más que decir
donde expusimos mostrar las fotos que tomamos del evento y más que explicar
nuestro estilo concretarlo con las reproducciones de nuestra obra.
Esto no
es hipótesis previa al hecho sino conclusión recogida tras trabajo concreto de
campo. Desde el año pasado direcciono a
mi blog cuando me piden que envíe a una postulación para exponer mi CV e
imágenes de algunas obras. He comprobado
que sirve, tanto para que me rechacen de entrada (“demasiados desnudos, demasiada carga erótica en el conjunto; no es el
perfil de la galería”) o para que me abran alguna puerta sabiendo
exactamente de qué se trata lo que hago y no toparnos después –ni los
convocantes ni yo- con sorpresas desagradables.
Un currículum visual y dinámico, actualizado,
amplio y documentado, así entiendo este blog (además de que sea mi trinchera
literaria, mi recurso de catarsis ante la frustración cotidiana y mi santuario para pensar entre
dos –la computadora y yo- en una voz escrita las dudas y las decisiones a tomar… entre otras cosas).
No hay comentarios:
Publicar un comentario